ARCORES colabora con PROCLADE

La ayuda de emergencia a los refugiados y desplazados de Ucrania, en la que ARCORES colabora con la fundación PROCLADE, sigue su curso en la localidad de Truskavets, cercana a la frontera con Polonia. Ya han llegado dos furgonetas repletas de productos básicos, la última de ellas el pasado 30 de marzo, y a través de ARCORES se han recogido 18.000 euros, gracias a la generosidad de muchos socios y colaboradores.

La comunidad de religiosos claretianos de Truscavets utilizó los primeros fondos para realizar compras en Ucrania de productos como alimentos, mantas, ropa de abrigo y medicinas. Estos artículos, junto con el pago de gasolina y ayudas en metálico (que se realizó en casos específicos), han sido entregados a personas que huían de la guerra hacia Polonia, en su mayoría mujeres y niños.

Escasez de productos

Desde mitad de marzo, la escasez de estos productos en Ucrania ha aumentado de tal manera que la comunidad claretiana se ha visto obligada a cambiar la estrategia, comenzando a comprar los artículos en Polonia y trasladándolos en furgonetas a Truskavets para continuar el reparto.

Hasta la fecha, el flujo de salida de personas hacia Polonia, pasando por esta localidad fronteriza, sigue incesante, si bien se producen dos situaciones preocupantes. La primera es que Polonia empieza a verse desbordada en sus capacidades. La segunda es que las personas que huyen de Ucrania después de más de un mes de guerra ya no son las que tenían algunas posibilidades económicas, pues esas salieron en las primeras oleadas, sino aquellos que casi no tienen recursos y que, como pueden, van llegando hacia la frontera. Estos refugiados no tienen nada y hay que darles prácticamente todo para que continúen su viaje.