Montejurra facilita el acceso al agua en Sierra Leona

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Agua en Sierra Leona

La Mancomunidad de Montejurra ha concedido a ARCORES España 2.850 euros para el proyecto «Acceso a agua potable a la escuela y comunidad rural de Kamalo, Sierra Leona, mediante la construcción de un pozo».

El programa consiste en la construcción y puesta en marcha de un pozo de agua potable en el campus escolar de Saint Paul, en la comunidad rural de Kamalo. Esta intervención beneficiará tanto a los estudiantes y los profesores como a todas las personas de dicha comunidad, que podrán tener acceso al pozo siempre que lo necesitarán. 

En busca del agua

El pozo evitará que los niños y sus familias tengan que recorrer muchos kilómetros en busca de agua, así como que consuman agua contaminada de ríos o zonas estancadas, con el consiguiente peligro de contraer enfermedades graves.

Asimismo, se llevarán a cabo actividades formativas y de sensibilización hacia la comunidad sobre el uso adecuado del agua potable, prácticas higiénicas y el mantenimiento pertinente de los pozos.

Apoyo institucional

Este programa ha sido demandado por las autoridades locales, la comunidad educativa y los beneficiarios, y cuenta con el apoyo de todas las partes.

El campus escolar de Saint Paul cuenta con 710 alumnos y 14 profesores. La comunidad rural, a la cual beneficiará el proyecto, está formada por 3.023 personas, aunque al pozo podrán acceder incluso 10.000 personas de poblaciones cercanas.

Agua contaminada

El acceso al agua potable en muchas de las aldeas es inexistente. La falta de higiene personal y el uso de aguas contaminadas en ríos, que a veces están muy alejados de las aldeas, tienen como consecuencia la multiplicación de la mortalidad infantil, de las enfermedades gastrointestinales y dermatológicas y las complicaciones por infecciones tras sufrir heridas o cortes.

Además, se recoge el agua en la misma zona del río en el que cruzan animales y personas, y donde estas se bañan o lavan la ropa; e incuso donde realizan sus deposiciones, ya que en muchas cabañas no cuentan con aseos. Además, con frecuencia las aguas son muy turbias y con barro en tiempo de lluvias, o están estancadas en tiempo seco, lo que elimina la potabilidad. Durante los seis meses de lluvias éstas son torrenciales y constantes (de mayo a octubre), mientras que durante los seis meses de tiempo seco no cae ni una sola gota (de noviembre a abril).

 

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